25 años "sin" Millán Salcedo: Así dejó la tv el cómico de Martes y Trece tras un bulo homófobo

Los fracasos de la serie Kety no para y del programa Un millán de cosas, estrenado en 1998, supuso prácticamente el final de la carrera televisiva de Millán Salcedo quien, tras dos décadas de éxitos con Martes y Trece, no supo encajar estas decepciones laborales en solitario.

Desde entonces, Salcedo (Brazatortas, Ciudad Real, 14 de abril de 1955) ha protagonizado varias obras de teatro, escrito tres libros y ha rechazado innumerables ofertas para volver a la televisión. Del medio no se ha bajado su eterna pareja artística, Josema Yuste.

La retirada televisiva del cómico, que coprotagonizó el sketch de la empanadilla, perreó a Madonna y enfadó a Encarna Sánchez e Isabel Pantoja, se produjo en medio de una tormenta mediática que le dañaba gravemente. Algunos medios especularon hace un cuarto de siglo con que Martes y Trece había muerto porque Millán Salcedo no podía admitir que Josema Yuste le hubiese dado siempre calabazas sentimentales, pero él lo niega: "Josema no es mi tipo".

Es cierto que la relación entre ambos era tormentosa, tal y como se vislumbra en unas declaraciones que hizo Millán a El Mundo en 1997: "La vida de Josema no me gusta nada ni a él la mía. Martes y Trece se convirtió en una oficina. Y el trabajo creativo no tiene horarios. A mí no me importa currar hasta las cinco de la mañana, pero él lo considera una barbaridad. Somos distintos completamente . Ya estaba harto de trabajar como una mula para cobrar a medias".

"Yo, actualmente, no tengo ninguna gana de ver a Josema. No le tengo ningún odio, pero no volvería a trabajar con él ni aunque lo pidiera todo el pueblo español con pancartas. No es que no nos podamos ni ver, es que tenemos inteligencia y la hemos puesto al servicio de salvar este asunto. Si hubiéramos seguido los dos juntos, hubiéramos acabado fatal. La gente incluso nos habría abucheado", aseguraba.

A Bertín Osborne le explicó que en realidad el divorcio laboral se produjo por estrés: "Dejé Martes y Trece por saturación, por cansancio. Un día me quedé en blanco en una actuación y al día siguiente estaba ingresado. Estuve 40 días ingresado en el Incosol. Me dio un surmenage (síndrome de estrés prolongado). Allí me curé divinamente. Lo superé y decidí cortar con todas las cosas que me hacían daño, como las compañías que tenía, la adicción al tabaco y Martes y Trece, para mí era demasiado, así que decidí que cortaba y corté".

En 2018 explicaba que no tenía intención alguna de volver a la televisión: "No quiero hacer más televisión en mi vida. Mira, como Josema va a todos los programas parece que solo lo contratan a él y a mí no". Hace tres años se mostró dolido porque Yuste había dicho que ellos nunca habían sido amigos: "Últimamente no nos vemos demasiado. No me quiero meter en líos, pero es una pena porque hemos sido amigos desde jóvenes, hemos tenido los mismos amigos comunes, y que digan por ahí que no éramos amigos. Lo he hablado con él, pero como el que oye llover. No lo puedo entender".

Sus guerras con Isabel Pantoja, Mariló Montero, Ana Obregón o José Mota

Josema Yuste no ha sido el único que ha sufrido los dardos de Millán Salcedo, que ha protagonizado varias polémicas. Especialmente llamativo fue su enfado con la que fue su pareja artística en el único proyecto televisivo que ha aceptado en 25 años, el fallido El pueblo más divertido, de TVE.

El cómico manchego asegura que Mariló fue para él "una decepción". Y añadió: "No tengo nada contra esta señora. Una vez comimos juntos cuando estaba con Carlos Herrera y nos lo pasamos muy bien. Yo no quería hacer más televisión, pero me ofrecieron un programa familiar y blanco y me pareció bien ser copresentador con Mariló. Pero resulta que no me dejaron hacer nada. ¡Yo no pintaba nada allí! No hubo feeling, no pegábamos ni con cola. Ella iba por un lado y yo por otro".

Más recordada fue su guerra contra Ana Obregón, a la que parodió en Un millán de cosas después de que la artista se negase a que retrasasen el horario de ¿Qué apostamos? para emitir la serie del ex de Martes de Trece Kety no para.

"Ana Obregón me traicionó y yo la traición no la tolero, me parece el peor pecado que espero. Les dejo de hablar, directamente. Y si me puedo vengar, en plan cómico, alguna pulla suelto. Y así lo hice en un programa de Telecinco en el que a ella le explotaban las tetas", asegura.

Millán, tiempo atrás, había enfadado a Isabel Pantoja y Encarna Sánchez, protagonistas involuntarias del especial de Nochevieja de 1991 de Martes y Trece. Recuerda el cómico que entonces "había salido publicado por la prensa rosa que Encarna Sánchez e Isabel Pantoja habían estado pasando unos días de vacaciones en Marbella en el chalé de Encarna. Y nosotros teníamos todo el derecho ante Dios y ante los hombres de hacer una parodia. Igual que ellas de ponernos una demanda. Me parece que Encarna puso una querella a RTVE y a sus cómicos, o sea, a nosotros dos, y el juez la desestimó".

También dio que hablar su enfado con José Mota, al que acusó de pirateo. "José Mota y yo no nos llevamos bien. No me quiero enfrentar a esta persona. Simplemente digo que hay que citar la fuente de procedencia", aseguró. Es cierto que ambos cómicos finalmente se reconciliaron.

Vida dura en un orfanato

La vida de Millán Salcedo no ha sido fácil: el cómico se crió en un orfanato y cuando salió vivió en la portería sin luz natural que regentaba su madre. "El internado me marcó. A mí me sirvió. Mi padre murió cuando yo tenía siete años. Me tocó ir allí, un hospicio horrendo. Yo decía que me habían abandonado. Y entonces, apareció un cura y nos llamó a los nuevos para probarnos la voz para el coro. Y canté "Chiquitina" de Marisol. Le gusté y me puso de solista. Allí descubrí que me gustaba estar sobre los escenarios", asegura.

Sobre la portería explica que eran "los habitantes del escaparate". "No teníamos ni ducha, nos lavábamos en una pila. Mi hermano, mi hermana, mi madre y yo". Tampoco fue fácil la vida para Salcedo incluso en plena ola de éxitos, ya que el amor siempre le ha sido esquivo. "Nunca he tenido pareja, nadie me ha hecho tilín", reconoce.