Vistos los últimos acontecimientos, no es del todo improbable que el invitado que tenga el atrevimiento de asistir a El Hormiguero sea objetivo de Broncano y sus gamberrillos. El tono que imponen en La Revuelta admite ese tipo de coñas, bromas, comentarios jocosos o simplemente referencias al personaje que a esa hora se sienta en el plató del rival en Antena 3. El caso de la cantante Ana Mena este martes fue muy comentado en redes. La cantante andaluza es 'cliente' habitual de La Resistencia y puede que a ella no le afecte pero hay otros invitados a quienes no les agradan las alusiones en el programa de enfrente tanto como a la intérprete de A un paso de la Luna.
Los once guionistas (tres son mujeres) que les escriben las gracias tanto al presentador como a Sergio Bezos, Jorge Ponce o Ricardo Castella lo hacen con esa vaselina hilarante, esa comicidad de cuñaos que tan bien les funciona y es patente de corso para no dejar títere con cabeza en nombre de la libertad de expresión y las ilimitadas fronteras del humor. El resultado es un escrache de algodón dulce usando como combustible al artista, político o famosillo de turno que se acerque a Pablo Motos y así convertirlo en protagonista indirecto del programa usando al rival. ¿Se trata de exasperar a la competencia?
De Ana Mena, última fijación de estos revoltosos apandadores, a aquella Victoria Federica Marichalar que inauguró temporada en El Hormiguero, pasando por el pobre Javier Cámara, cuya compañera de serie acabó pidiendo disculpas por llamar fascista al presentador valenciano: muchos han sido quienes han escuchado sus nombres mientras respondían a Trancas y Barrancas. Como decimos, los revoltosos mejor pagados de España están en su derecho de reírse de todos y de opinar de todo, aunque lo hagan desde la televisión de todos y con el dinero de todos. Otra cosa es que comience un run run entre artistas y su entorno por los señalamientos en La Revuelta y no todos estén tan contentos como Ana Mena.
Tatuarse la cara de Pablo Motos en el pecho, ponerles a unos perros la careta de las hormigas o ese continuo salpimentado de pullas y chistes responden a una razón que adivinamos: la estrategia de Broncano y compañía consiste en decirle cada día en voz alta y ante sus espectadores a Pablo Motos que si tiene bemoles salga a la calle a pegarse con ellos. "Pa chulo yo y para pegarse mi padre o eso me lo dices en la calle" son las frases que subyacen, el subtexto de ese cachondeo escrachero. Es evidente que La 1 ha convertido en rutina mezclar las pullas a El Hormiguero con las alusiones a los invitados del programa de Pablo Motos. A unos, como a Ana Mena, les gusta y hasta acuden luego al teatro Príncipe para reírle las gracias a Broncano y contarle lo bien que lo pasaron con su rival, además de cuánto sexo practicó el mes pasado y cuánto dinero le queda en el banco. Pero no a todos les gusta este método de parasitar el invitado del colega de Antena 3 para ganar notoriedad.
Iba a venir hoy @AnaMenaMusic pero por lo que sea no le cuadraba venir hoy, se le complicó la cosa. #LaRevuelta A ver si mañana es posible, si nos da igual. Cuando sea. Aquí no se veta nadie y todxs están invitadxs. pic.twitter.com/xIHNTTTXxy
— La Revuelta (@LaRevuelta_TVE) October 1, 2024
Este lunes, Ana Mena no era la invitada del programa de Broncano, sino que estaba justo a esa misma hora en El Hormiguero. Pero en La Revuelta decidieron hablar de ella, de El Hormiguero y hacer bromas al respecto. Pero, si en esta ocasión, fue la artista andaluza (a quien no le molestó), podemos echar para atrás y ver que no hay día que en La Revuelta no se fije en El Hormiguero por su invitado o por el motivo que sea, hable de Pablo Motos o de cualquiera de sus personajes, con la esperanza (quizá) de que en el programa de Antena 3 piquen el anzuelo y terminen respondiendo, para así avivar las llamas de un duelo que en su primer mes, septiembre, dejó a El Hormiguero victorioso como el programa más visto del mes.
Este señalamiento público no divierte a todo el mundo tanto como a Ana Mena. Fuentes próximas a diferentes artistas coinciden en otros casos hay ya cierto hartazgo por la actitud tanto en el programa como en redes que está llevando a cabo La Revuelta, poniendo el foco entre el invitado que decide ir a su programa y el que decide ir a El hormiguero. "Estas cosas no son normales. Cuando un artista acude a un programa, forma parte de muchas variables como su agenda, su estrategia promocional e incluso su preferencia particular. Es algo que los programas de televisión y radio siempre han entendido sin necesidad de hacer señalamientos públicos", apuntan expertos del sector.
Imagen dañada de artistas
Otro punto que empieza a colear entre los mentideros del sector son las consecuencias negativas que en muchos casos están sufriendo alguno invitados más famosos tras acudir a La Revuelta, como han sido el caso de Danna Paola. El Atlético de Madrid canceló su actuación en el derbi tras unas palabras de la artista mexicana en el programa de Broncano manifestando su madridismo que no sentaron bien en el club rojiblanco; quizá más por el tono que por el contenido. También fue objeto de críticas la actriz Irene Escolar tras pasar por La Revuelta, a cuenta de un comentario sobre su imposibilidad para acceder a una vivienda. La opinión del entorno de varios artistas es que Broncano expone demasiado a sus invitados, obligándoles a tomar partido de forma muy simplista en temas delicados y polémicos. Un hecho que beneficia al programa, pues genera titulares y notoriedad, pero que pone entre la espada y la pared al invitado.
El morbo, la polémica o la provocación son las mejores armas de Broncano para intentar mantener el éxito y la notoriedad de su programa y evitar así la fuga progresiva de espectadores: este lunes La Revuelta bajaba por primera vez de los dos millones de espectadores y ha anotado mínimo histórico con un 14,5%; lejos de los casi 20 puntos que llegó a promediar en su primera semana. Siga o no el desgaste de sus audiencias, lo que preocupa a muchos de quienes gestionan las carreras de las estrellas es que éstas sean utilizadas por Broncano y su séquito con señalamientos públicos si tiene la "osadía" de ir a la competencia. Dejan claro que ellos tiene otra oferta (¿imposible de rechazar?). Tal vez a Ana Mena no le quedó más remedio que aceptarla este miércoles para compensar su "desfachatez" de haber ido a El Hormiguero.
