A prueba la berlina pequeña enchufable de Mercedes, el A250e Sedan
- Asocia un motor de gasolina de 163 caballos con otro eléctrico de 109 CV, ofreciendo una potencia combinada de 218 CV.
- Una elegante berlina con la estética de un Clase C y las dimensiones de un modelo compacto.
- Con una autonomía eléctrica homologada de 82 km dispone de la etiqueta "0 emisiones".

Carlos Cancela
Nuestra prueba de esta semana corresponde al Mercedes Clase A Sedan en su variante con mecánica híbrida enchufable. Etiqueta "0 emisiones" y 82 km de autonomía en una berlina compacta muy elegante y confortable que cuesta 51.000 euros.
Este Mercedes A250e es una buena opción para aquellas personas que necesitan un coche para moverse a diario por la ciudad haciendo bastante kilómetros, en torno a 50 km diarios y quieren hacerlo en modo solo eléctrico. Y al mismo tiempo necesitan un vehículo para hacer viajes los fines de semana o viajar con frecuencia por carretera, pero no quieren tener dios coches, uno para cada tipo de uso. La del híbrido enchufable es la mejor respuesta para esta dualidad.
El Clase A sin duda es una de las claves del gran éxito de la marca de la estrella desde el lanzamiento del modelo allá por el año 2012. Sus dimensiones, su mecánica, su estilo rompedor en su momento, pero sobre todo la gran cantidad de versiones y opciones de motor y de carrocería que ofrece, permiten cubrir un amplio abanico de necesidades para todo tipo de usuarios.
Y es que si buscamos un modelo compacto, el Clase A, si queremos un SUV de dimensiones compactas, el GLA. Si lo que necesitamos es una berlina de aspecto muy dinámico y llamativo tenemos el CLA, también disponible en una variante aún más espectacular, el CLA Shooting Brake. Y también tenemos dentro de su gama una berlina de dimensiones compactas que supone el concepto del Clase C, pero a una escala reducida y por ello más asequible, el Sedan.
Es decir, que menos un familiar, tenemos todas las opciones disponibles en la familia compacta de Mercedes. Y por ello es un vehículo muy importante con el que la marca alemana logró rebajar notablemente la edad media de sus clientes, que hasta 2012 era muy elevada.
Y si hablamos de versiones mecánicas, también son muchas y muy variadas las opciones disponibles. En este sentido, desde un pequeño motor de gasolina o de gasóleo, respectivamente con 136 o 116 caballos, hasta las versiones más potentes firmadas por AMG, con hasta 420 CV, o las variantes electrificadas.
La apuesta de Mercedes por la electrificación ha sido total desde el primer momento, y el Clase A no podía quedarse descolgado. Por ello, tiene una variante híbrida enchufable, la que hemos probado esta vez, y una opción 100% eléctrica, con el EQA. Es decir, todas las opciones para cubrir todas las necesidades posibles.
Clase A Sedán
Pero vayamos con nuestra prueba. En principio, las berlinas de tamaño compacto no tienen en el mercado español una buena aceptación. En estos momentos, con las ventas de SUV disparadas, son pocos los que buscan este tipo de carrocería. Pero en el caso del modelo de Mercedes, es diferente. Lo es porque ofrece una estética muy similar a la de las tradicionales berlinas de la marca, los Clase C o Clase E, pero en una escala un poco menor.
Por ello, para un tipo de usuario que durante años ha usado los más grandes, con el paso del tiempo puede ser una opción interesante este Clase A Sedan. Y también para los clientes más jóvenes que buscan un coche algo más representativo pero sin querer hacer una gran inversión económica.
El puesto de conducción es el tradicional de un nuevo Mercedes con ese cuadro formado por las dos pantallas en una pieza unida que proporciona un aspecto magnífico. Hay distintas opciones de configuración y visualización. Me resulta muy agradable porque hay mucha información disponible, pero sobre todo es bastante fácil e intuitivo de utilizar. Una de las cosas que más me gusta es el cuentavueltas, en el que encontramos en el mismo indicador el poder saber cuándo está girando el motor de gasolina y cuándo se para y empieza a funcionar solo en eléctrico.
Cambio de 8 marchas
La palanca de cambio es la tradicional de los Mercedes con el cambio automático. Va situada en una palanca detrás del volante en el lado derecho. Es decir, donde en el resto de coches llevamos el limpiaparabrisas, lo que siempre me crea algún problema. Lógicamente, un usuario de un Mercedes nunca se va a equivocar, pero cuando solo se conduce un modelo de Mercedes cada dos o tres meses eso es diferente y se puede crear confusión.
Volvamos a su caja de cambios. En este caso es de doble embrague con ocho relaciones y proporciona un funcionamiento perfecto, combinando las dos motorizaciones posibles. Este coche, con su mecánica híbrida enchufable, en principio lo más razonable es utilizarlo a diario siempre en modo eléctrico. Y eso sobre todo en ciudad pero también por carretera si hacemos desplazamientos cortos. En el caso de hacer un viaje más largo, de más de 100 km, es más útil el modo híbrido, porque entonces buscará el propio sistema la mejor opción de consumo.
El Clase A es una berlina de aspecto elegante que parece más grande de lo que realmente es. No hay que olvidar que su habitáculo es el mismo que el de la versión compacta con un tercer volumen añadido. Eso hace que su interior sea algo justo, sobre todo en lo que a espacio para las piernas se refiere en las plazas posteriores.
Maletero justo
También su maletero, aunque lógicamente mejora respecto al modelo compacto, también resulta un poco limitado. En realidad son 345 litros, pero es que esta cifra se ve perjudicada por la presencia de la batería del sistema híbrido enchufable que le resta hasta 75 litros respecto a las variantes con mecánica diesel o gasolina.
En lo que sí es un Mercedes más, con todas las ventajas que esto conlleva, es en su puesto de conducción, en su dinamismo y en la clase que transmite en cada detalle de su interior. Asientos muy buenos, que ofrecen una buena sujeción del cuerpo y, sobre todo, terminados en alcantara que proporciona una calidad percibida magnífica, la típica de cualquier modelo de Mercedes.
Les decía que me gusta mucho el cuadro por la completa información que ofrece, y también el sistema MBUX de última generación. Yo que estoy poco interesado en las últimas tecnologías de conectividad y demás, me parece genial. Solo utilizar las palabras mágicas "hey Mercedes", pero ya incluso sin llegar a utilizarlas, el coche sabe cuándo queremos algo.
Y en esta última generación lo entiende absolutamente todo. Desde el uso de la radio, o del navegador, o de los sistemas de ayuda, hasta encontrar un restaurante italiano en nuestra zona. Todo es muy fácil de utilizar y aporta la máxima seguridad, porque no es necesario quitar la vista de la carretera para solucionar cualquier situación.
Mecánicamente, este modelo es una buena alternativa, si se dan las condiciones adecuadas en nuestra situación personal. Es decir, si tenemos un punto de recarga operativo, ya sea en casa o en el trabajo, para poder recargar cada día el vehículo. Tiene dos motores bastante equilibrados.
Dos motores
Por un lado uno de gasolina de solo 1,4 litros de cilindrada que proporciona 163 caballos y mueve con mucha soltura este vehículo cuyo peso ronda los 1.700 kilos. Sobre todo con ese cambio de doble embrague, muy rápido, que ante cualquier falta de potencia reduce una o dos marchas para asegurar la necesaria agilidad.
La diferencia está en su motor eléctrico, de 109 caballos. En este caso se trata de un propulsor mucho más ágil, que no requiere del cambio porque ofrece par instantáneo desde que pisamos el acelerador. Y es la combinación de ambos la que proporciona esa gran agilidad de marcha, que permite una cifra de 7,4 segundos para pasar de 0 a 100 km/h, en un coche que busca ante todo ser eficiente.
Lo que más me ha gustado es que ofrece un aspecto muy elegante y diferenciado dentro del segmento compacto. Su terminación y acabado interior muy lujoso y el puesto de conducción en el que es todo tan fácil que no da ninguna pereza el hacer muchos kilómetros. Por supuesto me ha gustado su mecánica y la etiqueta "0 emisiones" por las facilidades a la hora de rodar en el centro de la ciudad y, en el caso de Madrid poder aparcar sin limitaciones.
Y lo que menos me ha gustado, su precio elevado, 51.500 euros. Por supuesto lo vale, por todo lo que ofrece, pero no deja de ser mucho dinero. Y el maletero también me parece algo justo, porque no solo es el volumen de 345 litros, sino que por sus formas es largo, pero con pocva altura y eso complica aún más sus posibilidades.
Ficha técnica
Motor de gasolina: 4 cilindros en línea
Potencia máxima: 163 CV
Cilindrada: 1.333 cc.
Combustible: gasolina
Motor eléctrico
Potencia 110 CV
Potencia combinada: 218 CV
Par motor: 450 Nm
Batería: 15,6 kWh
Autonomía homologada: 82 km
Velocidad máxima: 230 km/h
Aceleración de 0 a 100 km/h, 7,5 segundos
Tracción: Delantera
Consumos homologado WLTP en ciclo combinado 0,8 litros.
Dimensiones (longitud/anchura/altura), 4,55 x 1,80 x 1,46 metros
Capacidad maletero: 345 litros.
Peso en vacío: 1.780 kg.
Precio: 51.500 euros.