Lamborghini ha desvelado en Sant'Agata Bolognese, en el marco de los festejos de su 50º aniversario, su última gran creación, el Egoista, un monoplaza de diseño extremo con un motor V10 de 5.2 litros que entrega una potencia de 600 caballos.
Según ha reconocido el propio jefe de Diseño del Grupo Volkswagen al que pertenece la firma italiana, Walter De Silva, se trata de un automóvil "más concebido con el corazón que con la cabeza".
Hasta tal punto que el nombre con que ha sido bautizado trata de recoger toda la pasión por el diseño, la tecnología y la diversión en la conducción por encima de cualquier otro criterio. "Es un coche fabricado para una sola persona, para que pueda divertirse y expresar su personalidad al máximo. Está diseñado exclusivamente para gente hipersofisticada que quiere sólo las cosas más extremas y especiales en el mundo. Representa el hedonismo llevado al extremo, en una palabra: egoista (egoísta) ", explica Da Silva.
Un 'toro' del futuro
De su radical diseño que evoca el de una nave espacial, llama la atención muy especialmente su singular puesto de mando, que ha sido concebida como una sección independiente al modo de la tradicional cabina de los aviones caza.
Su exterior se una estructura muy muscular constituida por acentuados ángulos fruto de la natural convivencia entre sus salientes y áreas vacías. La carrocería se extiende a lo largo por un estilizado perfil que, como buen 'toro', acaba en una especie de cuernos que realzan su agresividad, dinamismo y aspecto futurista