
En el llamado 'Escorial de Arriba', un grupo de sanlorentinos han acabado con 20 años de Gobierno popular. Vecinos por San Lorenzo y otras cinco fuerzas políticas trabajan por mejorar este municipio.
Que hace una licenciada en Física, madre de tres hijos, que tenía un trabajo en el Centro Europeo de Astronomía Espacial metida a política? La explicación es sencilla: en 1999 se instaló en San Lorenzo de El Escorial y en 2012 contactó con la recién nacida Asociación de Vecinos de San Lorenzo de El Escorial, una iniciativa que "surgió por la necesidad de mejorar la gestión. De que hubiera un partido que se dedicara sólo a hacer política municipal. La única ideología que nos une es la que valga para mejorar San Lorenzo, independientemente de izquierdas y derechas", explica Blanca Juárez Lorca, alcaldesa del municipio. Vecinos formó candidatura con ella como cabeza de lista para las municipales de mayo de 2015. Obtuvieron dos concejales y fue investida alcaldesa con el apoyo de los diez ediles de Ciudadanos (C?s), Sí Se Puede San Lorenzo (SSPSL), Vecinos por San Lorenzo (VxSL), PSOE, En Común San Lorenzo y Pueblo de San Lorenzo (PuSL) formando Gobierno en coalición con estos tres últimos partidos más VxSL. "Se consiguió terminar con la hegemonía del PP con el acuerdo de seis partidos políticos muy diferentes, pero con un punto en común fundamental: la necesidad del cambio". Tras casi dos años como regidora no habla de objetivos, sino del objetivo: "Mejorar las condiciones de vida de los vecinos de San Lorenzo. Y esto incluye el ámbito de formación, laboral o social".
¡El llamado Escorial de Arriba -para diferenciarlo de El Escorial-, es un municipio eminentemente de servicios. No en vano, es uno de los destinos turísticos más importantes de la Comunidad de Madrid y alberga dos de los monumentos más visitados entre los gestionados por Patrimonio Nacional: el Monasterio de El Escorial y el Valle de los Caídos. "Nuestra economía se sustenta en el sector servicios, la que transcurre en el propio municipio. Una gran parte de la población trabaja en localidades de los alrededores y, por supuesto, en Madrid capital, y este trabajo se desarrolla ya en otros sectores". Aún así, no considera San Lorenzo un barrio de Madrid, pues "tiene unas características propias únicas que nos diferencian del resto: nuestro entorno, con un espacio natural protegido superior al 85 por ciento de nuestro término municipal; ser Patrimonio de la Humanidad, estamos dentro de un territorio declarado Bien de Interés Cultural?". Sin embargo, a juicio de Juárez, San Lorenzo es "un municipio con un gran potencial pero al cual se le había ido dejando morir. Aspira a ser un municipio respetuoso con las personas, con el medioambiente; un municipio sostenible, que sepa vivir integrado en el entorno privilegiado que le rodea. Y que esto se transmita a nuestros visitantes". Y para satisfacer a todos aquellos visitantes o habitantes del municipio, "hay casi un centenar de establecimientos entre bares, restaurantes y hoteles". Además, en San Lorenzo existen alrededor de 1.600 profesionales y pequeñas y medianas empresas, la mayoría del sector servicios. Aunque el turismo suele estar alejado de las cifras de paro, el número total de parados en marzo de 2017 es de 978 personas, un 10,05 por ciento del total de la población activa. "En la medida de nuestras posibilidades vamos a intentar mejorar la formación, tanto de empresarios como de los parados. Por otro lado, intentaremos ampliar la oferta turística del municipio".
Una oferta turística que puede verse lastrada por el envejecimiento de algunas infraestructuras: "Las infraestructuras en San Lorenzo son buenas, pero algunas son bastante antiguas y necesitan inversión para su mejora y mantenimiento. Otras infraestructuras están inacabadas, como el nuevo edificio de los juzgados, y otras infraestructuras se construyeron sin un plan de viabilidad previo, lo que nos lleva a gastos innecesarios año a año -centro de agua y salud-", explica la regidora.
A su llegada al Ayuntamiento, Juárez no se encontró, como en otros municipios, las arcas vacías pero tampoco en una situación muy boyante. "Las cuentas, a raíz de las ayudas dadas por el Gobierno de rescate a los ayuntamientos en el pago a proveedores estaban empezando a mejorar en el año 2015. Y en 2016 hemos tenido superávit. Aún así, los presupuestos no han sido fáciles de ajustar, ya que hemos tenido unos cuantos pagos imprevistos sobre todo debido a sentencias que hemos tenido que pagar. También se han quitado de las cuentas previsiones de ingresos de más de 2 millones de euros que se habían mantenido durante años y que nunca se han llegado a cobrar".
Con respecto a la deuda, a 1 de enero de 2017 era de 7.076.688,40 euros (35,94 por ciento) y la previsión para el 31 de diciembre es de 6.183.997,25 (32 por ciento) sobre 18 millones de presupuesto. "Tenemos intención de no aumentarla y de ir amortizándola lo antes posible, aunque ahora las condiciones en los bancos no son perjudiciales para el Ayuntamiento", explica la alcaldesa. Por último, Juárez, que está en política de paso aunque entiende que la municipal es más sencilla "porque puedes conocer muy bien cada caso que se te plantee", le pediría a la Comunidad "que no se retrasen en los pagos, mayor utilización de sus espacios -auditorio, coliseo-, mayor implicación en las que se supone que son sus competencias -educación y cuidado del monte- y que termine la obra del edificio de los juzgados".