
Uno de las empresas citrícolas valencianas históricas, Fontestad, sigue sacando jugo al negocio de las naranjas y las mandarinas. El grupo cerró su último ejercicio el pasado mes de agosto con un fuerte incremento de sus ventas, del 19%, hasta 178 millones de euros.
La conocida marca naranjera registró un resultado consolidado de 5,5 millones de euros en el ejercicio 2023. Una cifra que supone un significativo descenso respecto al anterior, en que el beneficio alcanzó los 9,1 millones, pero debido a las plusvalías extraordinarias que obtuvo entonces. En el anterior resultado el grupo agrícola incluyó la venta de sus participaciones en dos planta solares que le generaron unos ingresos financieros extraordinarios de 4,9 millones de euros.
En su memoria de las cuentas anuales, el grupo destaca que mantiene "una sólida política exportadora con productos de alta calidad y el aval que supone nuestro gran potencial comercial y de conocimiento para actuar en cualquier país del mundo". Así, señala que opera en total en 16 países, "siendo España, Francia, Alemania y el Reino Unido donde se realizan más operaciones".
Sus principales clientes grandes superficies nacionales e internacionales, y comercios de productos alimenticios, para lo que el grupo cuenta con filiales en Francia, donde tiene un centro de distribución en Perpignan, y Reino Unido, aunque esta última inactiva. Además, durante la parte central del año, cuando no se dispone de producción nacional, la empresa importa naranjas y mandarinas de Sudáfrica, Uruguay, Argentina y Perú para mantener el suministro.
Central en Museros
El grupo valenciano tiene en Museros (Valencia) su principal centro de producción, con 50.000 metros cuadrados donde realiza los procesos necesarios para su comercialización: preenfriamiento, desverdización, conservación, precalibrado, tratamiento, confección y envasado. El grupo tiene una capacidad de producción de aproximadamente 160 millones de kilogramos de cítricos al año y una capacidad frigorífica superior a 14.000 toneladas. También tiene una subsede con cámaras frigoríficas en la Pobla de Farnals.
El grupo también cuenta con una filial en Mercamadrid para la distribución nacional. Durante el ejercicio pasado rozó los 1.400 de trabajadores de plantilla media anual.