
El fin de las vacaciones navideñas trae a Barcelona el inicio de la fase principal de una de las grandes obras de transporte previstas en la ciudad: la unión de las líneas de Ferrocarrils de la Generalitat de Cataluña (FGC) por el centro de la ciudad.
Así, este lunes 8 de enero empiezan los trabajos en superficie para preparar la construcción de un túnel de 4 kilómetros y tres nuevas estaciones (Hospital Clínic, Francesc Macià y Gràcia) que conectarán las paradas actuales de plaza de España y de Gràcia, que también serán remodeladas, según explicó el secretario de Movilidad e Infraestructuras de la Generalitat, Marc Sanglas.
El presupuesto total de la obra es de 412 millones de euros, por debajo de los 430 estimados inicialmente, debido a que el consorcio adjudicatario de la obra principal ofreció realizarla por 300 millones, en vez de los 320 de precio de salida de la licitación.
Con todo, la Generalitat ha añadido un sobrecoste de seis millones en el apartado de zona logística para salvar 60 árboles del Parc Joan Miró, que acogerá el grueso de los aprovisionamientos para la tuneladora, detalló David Prat, director de Infraestructuras de Movilidad.
El Govern aduce que es la opción menos costosa a nivel económico, ambiental y de afectación a vecinos para reducir el impacto de la zona logística, que supondrá talar 118 árboles del parque, el 13% del total, y que a partir de 2027 serán repuestos, cuando se desmantele el dispositivo.
Inicialmente, la Generalitat preveía ocupar 8.800 metros cuadrados del parque Joan Miró, pero finalmente serán 5.300, un 40% menos, y se talarán un 34% menos de árboles respecto a los 178 inicialmente afectados. También supondrá alejar la zona logística de los vecinos de la calle Diputació, de la biblioteca y del instituto.
En el resto de la ciudad, los primeros trabajos de obra civil comportarán en los próximos meses, de forma progresiva, diversas ocupaciones en superficie, que en esta fase inicial de la obra tendrán poca incidencia en la movilidad. Corresponden a estos ámbitos: plaza Espanya; calle Comte Urgell a la altura de la calle Consell de Cent; calle de Rosselló; plaza de Francesc Macià; y plaza de Gal·la Placídia.
El 4 de diciembre se completaron los trabajos de desvío de servicios afectados por el nuevo trazado ferroviario, como grandes conducciones de agua, y este año 2024, el impacto más visible será el pozo por el que entrará la tuneladora, ubicado en Gran Via, entre las calles Llançà y Vilamarí. La tuneladora llegará a mediados de 2025, para empezar a trabajar a finales de dicho año y excavar durante dos años y medio.
Antes de que la tuneladora llegue a las nuevas estaciones se deberán construir las propias estaciones, cuya licitación no se prevé hasta el mismo año 2025, según fuentes del Govern, y que se edificarán a través de pozos desde la superficie.
Además, esta primavera de 2024 también se iniciarán más de 13.500 inspecciones técnicas de edificios situados sobre el futuro túnel, así como la auscultación de otras infraestructuras y construcciones emblemáticas existentes.
Con la unión de las líneas de FGC por el centro de Barcelona, el operador ferroviario de la Generalitat prevé ganar 14,5 millones de usuarios anuales a partir de 2030, que es cuando está prevista la entrada en servicio del nuevo tramo. El estudio informativo del proyecto se remonta a 2014.