El atractivo de España como destino de inversión de propiedades de alta gama está impulsando el sector residencial de lujo tanto en el centro y en determinadas áreas metropolitanas de las grandes ciudades, como en los principales destinos turísticos. A los desarrollos de promociones convencionales se añade el constante anuncio de proyectos de branded residences con la participación de cadenas hoteleras y marcas de prestigio, ampliando el abanico de clientes de altos ingresos y colocando a España en la estela de los grandes destinos internacionales de lujo.
"En Madrid estamos rondando los 20.000 euros por metro cuadrado. Hace tres o cuatro años hablábamos de 12.000, 13.000 o 14.000 euros el metro, pero hoy en día es una locura hablamos ya de 20.000 euros el metro e incluso en algunos sitios, los precios están por encima de 20.000 euros. Con esos precios el cliente demanda una vivienda de muchísima calidad con todo tipo de servicios o amenities y quiere un servicio muy profesional tanto el promotor como el comprador final con un acompañamiento las 24 horas del día", afirma Luis Valdés, Managing Director Residential Sales Advisory de Colliers.
"El mercado del lujo en España está en un momento efervescente", asegura Bruno Rabassa, CEO de Berkshire Hathaway Homeservices, quien apunta que "la mayoría de las operaciones que hacemos en Madrid son de capital internacional. Es cierto que la presencia de norteamericanos tiene cada vez mayor peso motivado por el clima, la seguridad que ofrece nuestro país y los servicios, infraestructuras. y sanidad. Hay otras plazas donde el cliente nacional empieza a resurgir, por ejemplo en nuestra oficina de Barcelona tenemos muchos más clientes nacionales que internacionales, y sin embargo, en la Costa Blanca, Marbella o Málaga el peso internacional es de momento muy superior al nacional, pero yo creo que los españoles ya estamos terminando de hacer la digestión respecto a los tipos de interés y ahora que están bajando la demanda nacional ya ha salido al mercado y está buscando vivienda de lujo".
Fernando Catalán, consejero de Construye Capital presente en las Islas Baleares, asegura que "en las islas el 99% del cliente inversor es extranjero y el español se ha quedado desplazado. Un español no paga 20 millones en una vivienda en el municipio de Andratx en Palma de Mallorca, es un disparate y lo sabemos. En los últimos años ha cambiado el perfil del inversor porque inicialmente Palma de Mallorca era más de inversores alemanes y ahora son los países del Este los que están comprando y pagando esos precios y ya el empresario alemán tampoco llega. Entonces ya estamos entre el este y los americanos porque el capital español hace muchísimos años que se quedó completamente desplazado".
Por su parte, Sergio Calvete, director Keys Clints en CaixaBank, ya ve interés en Madrid por la vivienda de lujo por parte del inversor nacional. "En los tres o cuatro proyectos de lujo que estamos financiando en estos momentos en Madrid, nos ha sorprendido que nos cuentan los promotores que construyen, que el 50% de los compradores son nacionales: el empresario gallego, vasco, murciano o sevillano quiere tener una casa en el barrio Salamanca de obra nueva con grandes calidades y está pagando precios de comprador mexicano o estadounidense y eso, entre otras cosas, es porque fiscalmente Madrid es una plaza muy interesante". Los precios están muy elevados porque no hay oferta nueva en vivienda de lujo, afirma Bruno Rabassa.
"Estamos produciendo mucho menos de la mitad de lo que se está demandando. Nosotros que vendemos mucho producto de segunda mano lo que vemos cada semana es que existe una carencia de producto brutal y no sólo en compraventa también en alquiler. Si se ponen trabas al alquiler el casero al final se plantea dedicar el piso a otra actividad o retirarlo".
Madrid, referente mundial
La capital española se ha consolidado como referente mundial en el mercado inmobiliario de lujo. "El capital nuevo internacional que está llegando en concreto a Madrid se está viendo favorecido por la apertura de nuevos hoteles de cinco estrellas de lujo como Marriott Starwood, Mandarin Oriental o Four Seasons y las que están por llegar, y esto sin duda está generando nuevos compradores que no conocían Madrid y que invierten en vivienda de lujo. En este contexto surgen las branded residences que no solo ofrecen un producto inmobiliario, sino que crean un estilo de vida único, representando la máxima expresión del lujo. Estas propiedades, limitadas en número, están asociadas a marcas icónicas que cuidan cada detalle y ofrecen servicios exclusivos, redefiniendo el concepto de lujo", explica Luis Valdés.
El mercado del lujo se está viendo afectado no solo por la falta de oferta sino también por la falta de mano de obra. "En Baleares esto es un grave problema porque el millonario que compra una casa de 10 millones quiere un servicio premium de acorde al coste que pagó por su casa y cuando no está en la vivienda necesita limpieza, un jardinero etc. y no hay personal para cubrir estos servicios, como no hay personal para la construcción y por eso la industrialización es la solución en la construcción", apunta Fernando Catalán.
Sergio Calvete concluye que estamos en un momento saludable en cuanto a financiación y anima a los inversores a comprar vivienda de lujo. "A los precios actuales de la financiación, que estamos dando tipos fijos por debajo del 3%, el inversor puede destinar parte de sus ahorros a un inmueble de lujo con financiación y diversificar sus ahorros invirtiendo en otro sector sacando un rendimiento mayor".
