La administración de Donald Trump quiere comprar 200.000 bitcoins al año durante los próximos cinco años. Es decir, su objetivo es acumular 1 millón de unidades de la criptomoneda. Con este plan, sigue los pasos de Strategy, la empresa con más bitcoins del mundo, que ya tiene más de 600.000 tokens. La tendencia en auge del mercado es el maximalismo, una creencia que defienden los que tienen una fe absoluta en una única criptomoneda. Estos maximalistas suelen intentar acaparar la mayor cantidad posible.

Se está produciendo uno de los movimientos más grandes de la historia de Bitcoin, que no ha pasado desapercibido para quienes vigilan las entrañas de este mercado. Uno de los primeros creyentes y creadores de Bitcoin ha movido 80.000 bitcoins que llevaban sin tocarse 14 años, guardados en una cartera. Esas miles de criptomonedas ya están a la venta y la transacción no es baladí. No solo por su tamaño o por la rentabilidad de la operación, sino por lo que significa y lo que anticipa en el mercado.

Los bancos españoles empiezan a entrar en el mercado de las criptomonedas. En los últimos días, Openbank y Cecabank han obtenido la licencia MiCA que les permite ofrecer activos digitales en España y Europa. BBVA fue la primera entidad en conseguir la autorización y, poco a poco, irrumpen nuevos competidores. Las criptos van calando progresivamente en nuestro país y las entidades financieras tradicionales van sumándose a esta clase de activo.

El propio Banco Central Europeo (BCE) teme que un factor inesperado le quite sus poderes monetarios y trunque su sueño de que el euro gane peso ante la debilidad del dólar: el mercado cripto. Aunque las criptomonedas no compiten directamente con el dinero fiat, las stablecoins sí lo hacen. Y de momento, el liderazgo de la divisa americana en este terreno es arrollador. De hecho, las monedas estables respaldadas por el euro son solo el 1% del total del mercado. Y eso puede dejar fuera de juego al BCE y arrebatarle el control de la política monetaria, tal y como reconoce el propio organismo en un informe publicado este lunes. Incluso, el BCE señala que, aunque debería, no puede ser neutral en esta cuestión porque el dominio estadounidense de las stablecoins podría salirle muy caro al euro. Y no solo a la moneda o al propio banco central, sino también a los bancos.

Bit2Me ha obtenido la licencia MiCA, la que necesitan las firmas de criptomonedas para operar en Europa. La plataforma de intercambio de criptos se convierte en la primera en España en conseguir el visto bueno de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). En nuestro país, solo BBVA, Openbank y Cecabank cuentan con esa misma autorización, aunque en su caso, al ser entidades registradas, solo tenía que notificarlo al regulador.

La cafetería alicantina Vanadi Coffee empezó con su estrategia de acumular bitcoins hace dos meses y ya tiene 76 unidades. Pero ahora eleva la apuesta. El Consejo de Administración ha aprobado usar esos activos digitales como colateral para acceder a financiación y, con ella, comprar aún más bitcoins. Es decir, pretende recurrir a los préstamos sobrecolateralizados para seguir endeudándose.

Hace no mucho, el bitcoin generaba recelos entre los grandes inversores. Sin embargo, su popularidad ha subido como la espuma. La cripto es ahora uno de los activos más codiciados y está en cualquier cartera que se precie. Es más, se está propagando una tendencia que va más allá de comprar la criptomoneda a secas y que apuesta por acumular lo máximo posible. Cientos o miles de bitcoins, todo lo que los límites de la oferta y el mercado permitan. Estos compradores son conocidos como ballenas de bitcoin porque, como ocurre con el mamífero en el agua, sus movimientos pueden influir en todo el océano cripto. En algunos casos, su posicionamiento es tan agresivo que hay ballenas que están acumulando riesgos y que pueden acabar siendo muy tóxicas.

La empresa de Donald Trump, Trump Media & Technology Group (TMTG), ha destinado 2.000 millones de dólares a comprar bitcoins, según ha notificado al regulador. La compañía anunció a finales de mayo que iba a levantar capital para adquirir el activo, y desde entonces, la cripto ha rondado en promedio los 108.900 dólares. Por eso, la firma podría tener unos 18.365 bitcoins. Este movimiento la convierte en una ballena, que es cualquier inversor que tenga 1.000 tokens o más.

Las empresas de criptomonedas se enfrentan a su propia selectividad, al examen más importante que les pide Europa. En estos meses, tienen que solicitar la autorización correspondiente para operar en el mercado comunitario y su obtención es clave para su futuro. En este contexto, en el que las compañías están aplicando para conseguir ese permiso y los reguladores están repartiendo los aprobados y suspensos, ha surgido la polémica. Y en el centro de la misma está Malta.

La firma cripto Circle salió a bolsa a principios de junio. Muy pocos días le han hecho falta para lograr una subida del 652%, según su último cierre. La velocidad y contundencia del rally dejan claro que el mercado respalda a esta empresa. Pero los máximos históricos del bitcoin no tienen nada que ver con su rendimiento. Circle tiene sus propias stablecoins y se está perfilando como la ganadora de este mercado, que no se limita a lo cripto sino al negocio del dinero y de los pagos.