Francia vuelve al borde del abismo, al menos, político. El Gobierno del primer ministro François Bayrou -el cuarto desde la reelección de Emmanuel Macron como presidente de la República en abril de 2022- pende de un hilo ahora que, él mismo, ha puesto su cargo a disposición de la Asamblea Nacional. El Ejecutivo del centrista llamado a poner en orden las cuentas públicas de la segunda mayor economía de la eurozona se someterá a un voto de confianza el próximo 8 de septiembre. De momento, no tiene los apoyos para mantenerse en el poder y, según medios galos, a no ser que en los próximos 12 días ocurra un "milagro", Francia volverá a mediados del mes que viene a la casilla de salida y, mientras, las cuentas no salen.