
Todo parecía listo para que el Banco Central Europeo anunciase una doble subida de 50 puntos básicos en las reuniones del 2 de febrero y del 16 de marzo. Christine Lagarde, presidenta de la institución, había conseguido unir a prácticamente todo el Consejo de Gobierno con una cifra inferior a los 75 puntos básicos, a cambio de mantener los 50 como la nueva normalidad durante unos meses. Sin embargo, la desaceleración de la inflación y la casi segura decisión de la Reserva Federal de EEUU de reducir su ritmo de subidas a los 25 puntos básicos ha revuelto a parte del Consejo del BCE, que ahora se inclina también por un movimiento idéntico al de la Fed.
En la última reunión del año 2022, Christine Lagarde consiguió unir prácticamente a todo el Consejo de Gobierno del BCE con una decisión salomónica. Los 'halcones' (defienden unos tipos de interés más altos) querían seguir con subidas de 75 puntos básicos, mientras que las 'palomas' (defienden una política monetaria más laxa) abogaban por rebajar el ritmo de las subidas.
Lagarde optó por contentar ambos lados (o dejar descontentos a todos) prometiendo subidas de 50 puntos básicos, pero durante varias reuniones. Se rebaja el ritmo de subidas (bien para las 'palomas') a la vez que se mantenía en previsión un tipo de interés terminal alto (complaciendo a los 'halcones').
Esta unidad podría haber comenzado a quebrarse. Al BCE podría temblarle el pulso a medida que los tipos de interés entran en zona restrictiva y que otros bancos centrales empiezan a rebajar el tono. Este martes, la agencia Bloomberg filtraba que algunos miembros del Consejo estaban comenzando a considerar un ritmo más lento de aumentos de los tipos de interés que el indicado por la presidenta Christine Lagarde en diciembre, según funcionarios con conocimiento de sus discusiones.
Aunque los 50 puntos básicos de febrero sigue siendo probables, la perspectiva de un aumento menor de 25 puntos en la próxima reunión en marzo está ganando apoyo, según han revelado los funcionarios a Bloomberg, que como es habitual han pedido no ser identificados porque las conversaciones son confidenciales.
No obstante, François Villeroy, gobernador del Banco de Francia y miembro del Consejo de Gobierno, ha salido rápidamente esta mañana para resaltar que el camino marcado por Lagarde (los 50 pb son por ahora la nueva normalidad) sigue siendo válido. El banquero francés ha asegurado una vez más que el tipo terminal (el tipo de interés más alto de este ciclo de endurecimiento) llegará durante el verano, lo que dejará la tasa de depósito (el tipo de interés rector en la Eurozona) en la zona del 3,5%.
¿Por qué les tiembla el pulso a las 'palomas'?
"La rápida caída de la inflación provocada por la energía le está dando al BCE un poco de respiro, pero los responsables de la formulación de políticas seguirán centrados en las persistentes presiones subyacentes por ahora. No obstante, si la lectura subyacente comienza a disminuir desde el final del primer trimestre, esto podría ser suficiente para que el BCE reduzca el ritmo de las alzas a 25 puntos básicos en marzo, posiblemente extendiendo el ciclo hasta el segundo trimestre", asegura Maeva Cousin, economista sénior. Del mismo modo, opinan los expertos de RBC en una nota publicada esta mañana.
Desde ING también hacen alusión a este conflicto. En una nota publicada este martes destacaban que "el economista jefe del BCE Philip Lane ha ofrecido un razonamiento elaborado para respaldar la reciente retórica agresiva del BCE. Sin embargo, más tarde, una información filtrada por Bloomberg citaba a algunos funcionarios del BCE que revelaba que algunos miembros del Consejo de Gobierno en realidad están considerando un ritmo más lento (25 pb) de ajuste, lo que provocó una caída del euro contra el dólar".
Estos expertos de ING aseguran que "parece prematuro que el BCE relaje su narrativa agresiva ahora, y no nos sorprendería ver algunos comentarios destinados a 'mitigar' el impacto de los comentarios realizados ayer por la información de Bloomberg". Esto último ya ha sucedido con la intervención de Villeroy.
Por ahora, los bonos y las bolsas han reaccionado con subidas intensas a estos rumores, aunque el mercado de swaps sobre tipos de interés no da, por ahora, mucha credibilidad a este cambio en la hoja de ruta del BCE. Estos derivados que apuestan sobre el futuro de los tipos siguen vaticinando dos subidas de 50 puntos básicos seguidas (febrero y marzo), aunque han rebajado el tipo terminal a la zona del 3,3%, frente al 3,5% de hace unos días.