
Los principales índices europeos cierran su peor semana desde la crisis de los bancos regionales estadounidenses con SVB a la cabeza. El Ibex 35 cierra estos cinco días en los 9.248 puntos con lo que retrocede un 3,58% en su segunda semana peor semana del año. No obstante, a pesar de esta caída se mantiene sobre su soporte clave sobre los 9.200 puntos que evita una corrección adicional del 5%.
La economía no se está enfriando o, al menos, no al ritmo que esperaban los bancos centrales. El dato anticipado de empleo de Estados Unidos en el mes de junio reflejó lo que ya venían mostrando otros datos macroeconómicos: que pese a las subidas de tipos de interés la economía americana está mostrando una solidez no esperada. Frente a las 225.000 contrataciones que el mercado esperaba que se produjesen en junio en Estados Unidos, la cifra llegó a acercarse al medio millón.
La tónica de buenas cifras terminó de confirmarse este viernes con los últimos datos de empleo, en el que los ingresos medios se aceleraban hasta el 4,4% en junio, frente al 4,2% estimado. Y mientras la tasa de paro cayó al 3,6% en EEUU que suma más dudas entre los inversores.
Con este telón de fondo, el mercado ya compra que las agresivas políticas monetarias que estaban llevando a cabo el Banco Central Europeo y la Reserva Federal van a persistir por más tiempo del esperado. Un escenario que ha llevado a las principales bolsas del Viejo Continente a sufrir su peor cómputo semanal desde mediados de marzo, en plena caída por la eventual crisis financiera desatada a raíz de la quiebra de SVB. Solo la bolsa italiana se salva de caídas por encima del 3% desde el lunes. El Cac francés y el Ibex se llevan la peor parte, con correcciones que alcanzan al 3,8% y al 3,7%, respectivamente. Y el Dax y el EuroStoxx retroceden en cinco días un 3,4% y el 3,9%, respectivamente.
Pese a los desplomes, a nivel técnico, la bolsa europea se mantuvo sobre sus soportes. "El EuroStoxx 50 ha resistido sobre los 4.200 puntos y desde ahí trata de rebotar nuevamente. De mantenerse esta referencia dependerá que no se abra la puerta a un contexto potencialmente bajista que podría llevar al EuroStoxx 50 a buscar los mínimos de marzo en torno a los 4.000 enteros", analiza el asesor y estratega de Ecotrader, Joan Cabrero. La caída a esta zona "supondría asistir a una corrección del 10% desde el último máximo que estableció el índice en la resistencia horizontal y clave de los 4.415 puntos que, recuerden, es la que frenó las subidas tanto en el 2021 el 2022 y lo que va de 2023", apuntó Cabrero. El Ibex también logró cerrar la semana por encima del soporte que establecía el experto en los 9.200 puntos.
Al otro lado del charco, pese a los estragos que los datos macroeconómicos de EEUU están generando en Europa, los principales índices de Wall Street consiguen mantenerse a flote en una semana en la que cotizaron una sesión y media menos por la celebración del 4 de julio. Así, el Nasdaq 100 vuelve a registrar el mejor comportamiento estadounidense y se anota una revalorización que roza el 1% desde el lunes, con datos a media sesión. Por su parte, el S&P 500 avanza un ligero 0,4% en los últimos cinco días.
Caídas entre las energéticas
El zarpazo a la bolsa española ha sido tal desde el pasado lunes que solo cuatro valores dentro del Ibex 35 consiguen cerrar la semana en positivo: Indra, Banco Sabadell, Grifols y Bankinter. Ésta última entidad anotó en los pasados cinco días un aumento del 6% que, sin embargo, sigue en negativo desde que cerró el año. En cambio, el avance de casi el 3% de Banco Sabadell devuelve al banco a la parte alta de la tabla del Ibex 35.
El sector energético de la bolsa española acumuló la mayor parte del castigo. Y fueron Enagás y Acciona los valores que recibieron los recortes de precio más severos con caídas superiores al 11%, con Acciona cotizando en mínimos de agosto de 2021. No obstante, Acciona Energía también profundizaron su desplome que ya supera el 23% desde que comenzó el 2023
Que las contrataciones hayan caído en Estados Unidos durante el mes pasado a su nivel más bajo desde 2020 ha sido suficiente para frenar las ventas en el mercado de deuda. Los bonos soberanos estadounidenses registraron un aumento de su rentabilidad en toda la curva en las últimas sesiones aunque el mercado reflejara cierto alivio al cierre semanal.
El bono de Estados Unidos a dos años cayó bajo el 5% (aunque sigue estando 60 puntos básicos por encima de lo que ofrecía el 1 de enero de 2023) mientras el bono a diez años se mantiene en el 4% de rentabilidad, su nivel más alto desde el pasado marzo. La deuda soberana europea sigue la misma corriente que la norteamericana mientras los bonos británicos se disparan con los títulos a diez años en el 4,68%.