
La comisión de éxito, que se cobra cuando el fondo consigue un objetivo determinado -generalmente, el de batir a un índice de referencia- no se aplica de forma masiva en el mercado español. De los fondos de bolsa española disponibles para la venta en España, algo menos del 19% (15 de los 80 de los que hay datos) tienen establecida esta tarifa en su folleto.
De ellos, eso sí, prácticamente ninguno ha llegado a aplicarlo en 2019, según los datos de Morningstar, probablemente al no haber alcanzado sus objetivos. El porcentaje cae de forma llamativa, hasta el 5%, si nos ceñimos a los 20 mayores fondos de bolsa española -todos ellos, con más de 150 millones de euros de patrimonio-: sólo uno, el Mutuafondo España D FI, la establece.
Este tipo de comisiones tienen para el inversor la ventaja de que la gestora sólo gana si él gana. Según lo expresa Enrique Borrajeros, socio y director de desarrollo de negocio de Abante, "es una forma muy adecuada de alinear el interés del gestor con el suyo, sobre todo para aquellos inversores más sofisticados". Supone un compromiso, por denominarlo de algún modo, similar al que demuestran algunos gestores de fondos de autor al invertir en esos vehículos su propio patrimonio.
Ese 19% de productos que, según los datos de Morningstar y de los folletos registrados en la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV), prevén la aplicación de comisiones de éxito no es, en realidad, tan bajo, aunque los expertos consultados coindicen en que la cifra es, probablemente, más reducida que en la de otros países europeos.
"No es un porcentaje tan bajo, porque para establecer una comisión de éxito tienes que creer que puedes generar alfa", reflexiona Borrajeros, "de modo que, si piensas que es imposible batir al mercado, optas por los fondos índice", algo que hacen muchas entidades. El problema es precisamente, lamenta el director de desarrollo de negocio de Abante, "que en España hay muchos fondos que pasan por ser de gestión activa pero que realmente están muy pegados a índices". En otras palabras, que es frecuente encontrar gestión pasiva disfrazada de activa.
José María Luna, analista financiero independiente, apunta al desconocimiento del inversor español como motivo de que éste no demande estas comisiones: "Debemos ser conscientes de que sólo el 15 o el 16% del ahorro de las familias está en fondos; estamos en un país donde se invierte mucho en ladrillo y en depósitos, y la cultura de planificación financiera es escasa".
En muchos casos, añade, el inversor opta por los vehículos más tradicionales: garantizados de renta fija, monetarios, etc., y menos por vehículos mixtos y de bolsa, más susceptibles de aplicar este peaje. En cualquier caso, la aplicación de comisiones sobre resultados es más frecuente entre los productos de gestión alternativa o en los de liquidez diaria, como los de retorno absoluto.
No tiene sentido que la comisión se pague simplemente cuando el fondo logre rentabilidad positiva, critican desde Morningstar
El panorama en España, donde tres gigantes -CaixaBank, BBVA y Santander- acaparan el 46% del patrimonio en fondos, no se presta a la utilización de estos costes vinculados al rendimiento obtenido, que no suelen aplicar las gestoras de los grandes bancos sino las entidades independientes. "Para ellas, es una forma de llamar la atención", explica Luna; "No tienen una red de oficinas y una forma de atraer a partícipes, además del talento de sus gestores, es la política de costes".
Entre los 15 fondos de bolsa española que pueden comprarse en España y que sí prevén la aplicación de comisiones de éxito sólo se encuentra un gran banco español: BBVA, con su BBVA Bolsa Plus, que cobra un 9% por los "resultados positivos anuales del fondo", tal y como se detalla en su folleto. Los otros son el Abanca Renta Variable España, que aplica un 20% cuando este vehículo bata la rentabilidad del Ibex 35; los QMC II Iberian Capital C FIL y QMC III Iberian Capital Fund A FIL, ambos de Alantra, con un 15% -el QMC Iberian III, por ejemplo, cobra ese porcentaje siempre que la rentabilidad del fondo "iguale o supere a la media del Euribor de los últimos 12 meses, más el 5%", según el folleto-. Con comisiones algo más bajas encontramos al Crediinvest SICAV Spanish Value A, que aplica un 10%, al igual que el Sigma Investment House FCP Equ. Spain. Una comisión del 9% sobre resultados la tienen, además de en el ya citado BBVA Bolsa Plus, el Abante GF Spanish Opportunities Fund B, el Iberian Value FI, el Renta 4 Bolsa R, el Caja Ingenieros Iberian Equity A y el Okavango Delta, también de Abante. Y en el 5%, el 6% y el 7% se sitúan, respectivamente, el Mediolanum Ch Spain Equity, el Mutuafondo España D FI y el BNP Paribas Bolsa Española.
¿Comisión sin batir al índice?
Aspecto clave es cuándo se aplica la comisión; a Fernando Luque, editor senior de Morningstar, le cuesta encontrar justificación a que algunos fondos la cobren simplemente por obtener una rentabilidad positiva; opina que deben aplicarse sólo cuando batan a un índice concreto. Luna piensa lo mismo: "Desde mi punto de vista, si el índice cae un 10% y yo lo hago un 5%, no veo justificada esa comisión", reflexiona. Luque señala que, por otro lado, entre los fondos mixtos, el cobro de estas variables es cada vez más frecuente. Y el director de análisis de Arquia añade que, con la implantación de Mifid II, el inversor, al conocer los costes, será más exigente, de modo que las gestoras deberán ponerse las pilas y la utilización de estas comisiones deberían ser "su siguiente paso".
Otro aspecto controvertido es el concepto marca de agua, que sirve para impedir que un inversor pague dos veces por la misma rentabilidad obtenida. Por ley, la gestora debe evitar que un partícipe "soporte comisiones cuando el valor liquidativo de sus participaciones sea inferior a un valor previamente alcanzado por el fondo y por el que haya soportado comisiones sobre resultados". El problema es que esa marca de agua se resetea cada tres años, algo que, según critican desde Morningstar, sólo beneficia a las gestoras al permitir, en definitiva, que el cliente pague comisiones aunque haya perdido dinero.