
Bruselas refuerza su escrutinio sobre los gigantes del comercio electrónico. En este caso, le ha turno a la plataforma china de moda Shein. La Comisión Europea ha lanzado este lunes una investigación por romper la normativa comunitaria de consumo por prácticas engañosas como ofertas falsas, presión para vender o información engañosa. Un proceso que podría culminar con multas multimillonarias para la compañía.
La investigación se ejecutará de forma coordinada a nivel europeo entre las autoridades nacionales de consumo y los servicios del Ejecutivo comunitario. El foco estará puesto en varios puntos: descuentos falsos, presión para vender, información incorrecta y omitida, etiquetas engañosas, declaraciones de sostenibilidad falsas o datos de contacto ocultos.
Son varios los aspectos en los que pondrá el foco Bruselas. Por un lado, en lo que se refiere a las ofertas falsas: analizará si la compañía simula mostrar mejores ofertas con reducciones de precios que no se basan en los precios anteriores reales. También observará si ejerce presión sobre los consumidores para completar las compras utilizando tácticas como plazos límite que son falsos.
Además, la investigación se centrará en determinar si la plataforma de comercio electrónico muestra información incompleta o incorrecta sobre los derechos legales de los consumidores en lo relativo a las devoluciones de compra, los reembolsos y, en consecuencia, los compradores no pueden completar estos procesos.
También acusan a Shein de utilizar etiquetas de productos que sugieren que el artículo tiene algo especial, cuando en realidad se trata de un requisito de la ley; utiliza información para falsa para vender las bondades en sostenibilidad de los artículos y esconde los detalles de contacto, de tal manera que los consumidores no pueden comunicarse con la compañía para reclamar o presentar una queja.
Además, se ha pedido a la compañía china información para ver si cumple otras obligaciones de la normativa comunitaria en consumo, como la obligación de garantizar que las clasificaciones, reseñas y valoraciones de los productos no se presenten a los consumidores de forma engañosa.
Otro de los focos está puesto en ver si Shein informa a los consumidores sobre cómo se reparten las obligaciones del contrato entre un vendedor tercero y la plataforma. La investigación, coordinada por la red de protección de consumidores, contra el Shein está dirigida por las autoridades nacionales competentes de Bélgica, Francia, Irlanda y los Países Bajos, bajo la coordinación de la Comisión Europea.
La plataforma dispone ahora de un mes para responder a tales acusaciones proponer fórmulas para cumplir con los requisitos de derecho de los consumidores europeos. Dependiendo de la respuesta, puede ponerse en marcha un proceso de diálogo con la compañía.
En caso de que Shein no solucione los problemas, las autoridades nacionales pueden tomar medidas coercitivas para garantizar el cumplimiento. Esto incluye la posibilidad de imponer multas basadas en el volumen de negocios anual de la Shein en los Estados miembros de la UE afectados.
Desde la compañía china aseguran que han colaborado de "de manera constructiva con las autoridades nacionales de consumidores y con la Comisión Europea" para demostrar su compromiso con el cumplimiento de las leyes y normativas de la UE..